
09 Sep Zoom emprendedora. Capítulo 3: Cristina Palacios
Por Kipus Comunicación.
Cristina Palacios: “En México tenemos muchos estereotipos que definitivamente no ayudan ”
Trasladarse en auto en una gran ciudad, puede convertirse en la pesadilla de cualquiera. Cuando en las horas pico los transportes públicos se saturan, recurrir al automóvil para llegar al trabajo, supone un gasto excesivo en combustible y estacionamiento, dejando una altísima huella de carbono.
Para solucionar gran parte de este problema, Cristina Palacios fundó hace 6 años Aventones, una plataforma colaborativa que permite gestionar viajes compartidos, según las necesidades de los usuarios.
Esa empresa, que siguió un roadmap completo en el ecosistema de toda la región, pasando por NXTP Labs, Fundación Chile y Startup Chile, fue adquirida en 2015 por la firma europea BlaBlaCar. Atraída por el conocimiento del mercado local y la ambición empresarial, la multinacional permitió que la startup mexicana comenzase a brindar soluciones globales para una comunidad de 20 millones de usuarios, en 19 países diferentes.
Este “final feliz” de su primera empresa, tiene una historia más personal que los anuncios de negocios a los que habitualmente estamos acostumbrados.
Cristina nació en El Cairo y se crió en México. La curiosidad por los viajes y la arqueología la llevaron a explorar distintos lugares del mundo. Después de estudiar Administración de Empresas en la Universidad Iberoamericana, pasó por las áreas de Marketing (Kraft) y Finanzas (Scotiabank).
Por ese entonces, la idea de fundar Aventones ya era uno de los proyectos que revoloteaban en su mente, pero todavía le era difícil concretar el modo de acción y reconocerse en un rol de liderazgo, admite: “no me veía como emprendedora”. Cristina señala esta dificultad primera para empoderarse y llevar adelante un negocio propio, como una barrera que también es muy común entre la mayoría de las mujeres de la región, reflexiona: “En México tenemos muchos estereotipos que definitivamente no ayudan y hay muchísimo trabajo por hacer”, de allí que resalta el valor de movimiento como “Emprendedora LAC”, que incentiva a mujeres de América Latina y el Caribe a desarrollar todo su potencial personal y profesional para crear empresas de alto impacto.
Después de un tiempo en el Scotiabank y en medio de una crisis profesional profunda que la llevaba a replantearse los objetivos de su carrera, Palacios abandona su puesto en finanzas para dedicarse al trabajo social en una ONG: “Ahí me di cuenta que quería seguir haciendo una diferencia en el mundo, pero que la única forma era mediante ideas sostenibles económicamente”, explica.
Sin embargo esto aún no la conducía a donde quería llegar. Ya decidida a emprender, dejó atrás la ONG y conformó un equipo junto a Ignacio Cordero y Alberto Padilla.
La marca comenzó a escalar rápidamente y después de 5 años, se posicionó como la plataforma de viajes más exitosa a nivel regional. Su siguiente producto fue Rides, que entre otros servicios, permitía conectar conductores con pasajeros para moverse de una ciudad a otra o dentro de la misma. Sobre el éxito de ambos proyectos Cristina cuenta: “Rápidamente escalamos a otros países y con esto levantamos una ronda de inversión”.
En cuanto al rol femenino en este área, sostiene que es necesario seguir llamando a la acción: “es nuestro deber buscar inspirar y ayudar a otras mujeres a hacerlo”, afirma y asegura: “somos una empresa de desarrollo de software en la que buscamos asociarnos con emprendedores para desarrollar negocios de internet, me encantaría poder tener más cofounders mujeres”.
Hoy un año después de la venta de Aventones, Cristina sabe que lo suyo es poner ideas en movimiento y sigue su carrera como emprendedora en INNKU, un laboratorio de software donde construye empresas propias de base tecnológica.