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Historia de un verdadero “Elevator Pitch»
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Historia de un verdadero “Elevator Pitch»

Historia de un verdadero “Elevator Pitch»

Este es un post invitado de Liza Velarde, SEMKA.


 

Todo comenzó en mayo del 2012, unas semanas antes de irme a primer intercambio de carrera. Acababa de pasar por una situación decepcionante y donde se me dijo que no importaba cuando me esforzara, nunca llegaría a ser alguien en la vida.

Unas semanas después de recibir esas palabras, me llega la invitación para participar en un proyecto de ciencias para ayudar a personas enfermas con cáncer. Al platicar con Alejandro Abarca y Juan Felipe, ahora mis socios, y escuchar su visión y cómo planeaban desarrollar una tecnología para aislar las células tumorales circulantes (las responsables de la metástasis) con una muestra de sangre a muy bajo costo; me enamoré por completo del proyecto del cual ya formaba parte. Para entonces estaba en 5° semestre de mi carrera, es decir, llevaba la mitad de mis estudios cursados, por lo que mi principal preocupación era “¿cómo los voy a poder ayudar?”; aún me faltaba mucho por aprender de mis clases y profesores y era una alumna becada por la universidad. Lo único que sabía en aquel entonces, era que teníamos que movernos rápido y ver la manera de conseguir capital para construir los primeros prototipos; pero, ¿cómo?

Fue entonces que decidimos inscribirnos todos en la clase de emprendedor, para conocernos como equipo y escribir el plan de negocios. A la mitad del curso, ocurrió que se cerraron las negociaciones donde Heineken compró un número significativo de acciones de FEMSA, empresa donde el CEO que es parte del Consejo de la Universidad. Al ocurrir esto, le piden a Jean Francois van Boxmeer, CEO de Heineken, les comparta unas palabras a los alumnos de la escuela de Negocios, Ciencias Sociales y Humanidades; sólo permitían la entrada a 2 alumnos por carrera. De alguna manera, al escuchar de la invitación vi una oportunidad, por lo que después de visitar la Dirección de Carrera, e insistir por un lugar, me confirman a las 2 horas mi lugar dentro de la plática. Por lo que ese día, antes de reunirme con mis compañeros a la clase de emprendedor, me dirigí decidida a conseguir entablar una plática con los CEOs invitados.

En la plática, el CEO de Heineken explicó  entre varias cosas, como en su empresa estaban cambiando su visión a una más socialmente responsable de una manera activa. Terminada la plática, muchos directivos de mi universidad rodearon al CEO, haciendo difícil el acercamiento por parte de los alumnos. Mi plan era acercarme para pedirle apoyo para nuestro proyecto del cáncer. Unos minutos antes de hablar con él, mientras tomaban las fotos, muchos pensamientos llenaron mi cabeza, llena de miedo empecé a pensar: “esto es una pérdida de tiempo, esas personas no apoyan a proyectos estudiantiles”, “el giro de la empresa es la cerveza, no el cáncer”, “eres una estudiante, no una médico investigador”, “no tienes prototipos”, “eres muy joven” “¿quién eres tú?”. Por lo que, con pánico tomé el celular y después de realizar una rápida llamada con mi mamá, ambas acordamos una cosa, debería de intentarlo, ya que no tenía nada para perder; si nos apoyaba, podíamos llegar muy lejos, y si no, estaríamos en el mismo lugar que estábamos en ese momento, por lo que terminaría mis estudios y después buscaría la manera de apoyar a mi equipo en el transcurso.

El destino hizo que el CEO se quedara sólo por unos 10 segundos, unos 10 segundos que se sintieron eternos mientras combatía con mi mismo miedo y me convencía a mí misma que valía la pena intentarlo, por lo que, a pesar de lo que sentía, decidí acercarme y hacerle una sola pregunta: “¿do you support students proyects?” (¿Usted apoya a proyectos estudiantiles?), su respuesta fue que dependía de que quería hacer, por lo que me invitó a subirme al elevador con él y todos los directivos de mi universidad y el CEO de Femsa para que le platicara más de mi proyecto. En ese momento, todo el mundo desapareció, solo estábamos el CEO de Heineken y yo. Aún nerviosa, pero segura y entusiasta, le empecé a explicar cuál era la visión que me habían compartido mis compañeros una semanas atrás, sobre la tecnología que deseábamos construir, de las personas que queríamos ayudar, y de las ganas que teníamos de lograrlo.  Unos 12 pisos después, termino mi pitch y me pregunta “¿what do you want from me?” (¿Qué quieres de mí?), por lo que le respondo “anything is good” (cualquier cosa es buena), contactos, consejos, dinero, etc., por lo que me responde “Ok, you got it. Do you have a card?” en ese momento, no podía creer lo que estaba pasando, WOW! LO HICE! LO CONSEGUIMOS! No sabía que lo que estaba haciendo era un “elevator pitch”, y no estaba prepara con una tarjeta, algo que aprendí ese día “siempre lleva una tarjeta de presentación contigo”. Después de darme su tarjeta, y de despedirnos en el elevador, al cerrarse la puerta, perdí las fuerzas en las piernas y caí sentada en el elevador. Mi mente no podía procesar lo que acababa de pasar, era algo que no entendía pero que me llenaba de una alegría y satisfacción enorme. Por lo que llegando al piso, corrí a compartirles la noticia a mis compañeros que se quedaron atónitos e incrédulos de lo que había pasado. Eso fue lo que inició todo, lo que cambio nuestras vidas. Después del donativo que recibimos por parte de Heineken y Femsa, pudimos adquirir la maquinaria que necesitábamos para construir los prototipos, e invitamos a Eduardo Leal (socio) a que trabajara con nosotros. 3 años, 1000 prototipos, y varios concursos  después, aquí seguimos, trabajando 24/7. Ya contamos con un dispositivo funcional por lo que en los siguientes meses procederemos a hacer pruebas en pacientes, por lo que cada vez estamos más cerca de llegar a nuestra meta, que es ayudar a que millones de personas con cáncer reciban el tratamiento que necesitan y así aumentar su esperanza de vida.

Liza Velarde Co-founder de SEMKA, Starup Healt oriented, cuyo objetivo principal es el desarrollo de nuevas tecnologías y soluciones que ayudan a resolver los grandes problemas de la humanidad a través de la utilización y aplicación de la ciencia y la tecnología de una forma ética y responsable. Actualmente trabajan en el desarrollo de tecnologías para el control y la detección de cáncer, el uso de sistemas de bio-tecnologías microelectromecánicos (BioMEMS) Su rol en la compañía es: Obtención y aplicación de los fondos, negociación con los patrocinadores (Femsa-Heineken, Dell, ITESM (Instituto Tecnológico de Monterrey), relaciones públicas y planificación estratégica.